Si has llegado hasta aquí es por algo.
Me da igual qué o quién te ha traído, así que ya que estás, ponte cómodo que te cuento.
Soy una mujer con una desviación.
La del ímpetu del emprendimiento, una conducta como otra cualquiera.
Siempre he sido de echarme al ruedo, la “espontánea”. Impulsiva coloquialmente o proactiva en lo profesional. Lo mismo es.
Puedes llamarme como quieras. Tienes mi permiso y bendición.
Así que con una edad y liberada desesposada, decido que ya es hora de vivir como me dé la gana.
Y entonces, voy y oigo por primera vez la palabra coaching.
Couqué?
En una formación para emprendedores tuvo que ser.
Algo tan nuevo entonces que no lo había escuchado ni el tato.
Y empezaron a cobrar sentido muchas cosas.
Que yo desde que aprendí a leer no he parado.
Lectofílica perdida. Heredado de mi padre. Libros en las mesillas y en el váter.
Mi ex marido se venía arriba diciendo que eran de autoayuda los libros.
Quédate con el rollo de la pobre mujer débil. Eso sí que es de manual.
Tuve tres hijas de aquello.
Una me hizo abuela
Y la pequeña no nació “normal”
La diferente.
DiFcapacitada.
Y así fue marcada como se marca a las ganaderías.
Zas, patoalavida.
A fuego.
Malditas etiquetas que tanto daño hacen.
Así que le hago pucheros a las zonas de alcanfor.
Empecé haciendo coaching individual como es de cajón.
Practicando con sesiones que regalaba. Amigos y los amigos de mis amigos que son mis amigos
Y así fui sumando horas de vuelo.
Invertí en cursos para armarlo todo bien, no sé un negocio o algo y me empecé a codear con un montón de empresaurios que lo flipas
Una oportunidad de la leche.
Y cuando no había formación, pues a bucear.
Me sumergía en educación, que con una hija que no encaja tú me dirás
Y un huevo en neurociencias, comunicación, pedagogía o ventas.
Súmale a las de vuelo ahora las de inmersión. Tres por cuatro doce y me llevo una.
Volar mola, bucear me flipa…
…peeroo?
Siempre hay un pero
Que soy un animal terrestre
Que los pies en el suelo. De toda la vida de dios
Para morder el polvo en mi hábitat me faltaba algo.
Y di con los caballos.
Todo cuadra. Coge el chiste
Ahora haz un cóctel con todo.
Sírvete, bien frío pero hazlo en caliente
Eso tan singular soy yo.
Deseo que lo saborees y lo disfrutes.